Algunas frases recogidas del libro de Haruki Murakami: De qué hablo cuando hablo de correr.
- Si le echo ganas y consigo acabar la carrera, brota de mi interior una intensa sensación de frescura y renovación, que tiene también algo de autoabandono, como si me hubiera conseguido exprimir por completo.
- Correr largas distancias siempre había ido bien con mi naturaleza. Simplemente disfrutaba corriendo. Correr es para mí, de entre las numerosas costumbres adquiridas a lo largo de mi vida, tal vez la más provechosa y la que más sentido tenía. Y creo que, gracias a haber corrido ininterrumpidamente durante veintitantos años, mi cuerpo y mi espíritu se fueron formando y fortaleciendo.
- Desde antaño, no sé por qué, nunca he tenido especial interés en competir con los demás para ver quién gana o pierde. Y esta tendencia no ha cambiado, al hacerme adulto.
- Si uno prueba a correr un maratón se da cuenta de ello: a los corredores de fondo no les importa demasiado que otro corredor les supere o superar a otro durante la carrera.
-El orgullo de haber conseguido terminar la carrera es el criterio verdaderamente relevante para los corredores de fondo.
- Para un creador la motivación se halla, silenciosa, en su interior, de modo que no precisa buscar en el exterior ni formas ni criterios.
- Para mí, correr al tiempo que un ejercicio provechoso, ha sido también una metáfora útil.
- Aspirando a superarme, me iba esforzando día a día para conseguirlo.
- Mi nivel es extremadamente corriente (por no decir mediocre). Pero eso no es en absoluto importante. Lo importante es ir superándose, aunque sólo sea un poco con respecto al día anterior.
- El simple hecho de correr una hora todos los días, asegurándome con ello un tiempo de silencio sólo para mí, se convirtió en un hábito decisivo para mi salud mental.
- Bastaba con contemplar el paisaje que me rodeaba y mirar hacia mi interior. Eran momentos preciosos e insustituibles.
- Las nubes son sólo meras invitadas. Algo que pasa de largo y se dispersa. Y sólo queda el cielo. A nosotros no nos queda sino aceptar la existencia de ese inmenso recipiente tal cual es e intentar ir asimilándola.
- Las diferencias generan pequeños roces cotidianos y, a veces, la combinación de varios roces se transforma en un gran malentendido. No es agradable que te malinterpreten o que te critiquen. Te puedes sentir profundamente herido.
- A medida que uno acumula años, poco a poco va adquiriendo conciencia de que esas heridas y esa dureza son necesarias para la vida.
- Soy una persona con una estructura más física que inteligente.
- Al conseguir salir un poco a cambio abierto, surgió cierta confianza en mí mismo.
-El músculo se adquiere con dificultad y se pierde con facilidad. La grasa se adquiere con facilidad y se pierde con dificultad.
- El cuerpo es un sistema que aprende y funciona a base de práctica.
- Los músculos son como animales de carga dotados de buena memoria. Si los vas convenciendo, acaban por decir "de acuerdo".
- Mis músculos son de los que necesitan tiempo para arrancar. Su despegue es notablemente lento. Una vez empiezan a funcionar en caliente, pueden seguir en movimiento durante largo tiempo, sin forzalos y manteniendo un buen tono. Son los músculos idóneos para largas distancias y que por tanto, no están hechos para las cortas
- Es muchísimo mejor vivir diez años de vida con intensidad y perseverando en un firme objetivo, que vivir esos diez años de un modo vacuo y disperso.
- Si algo merece la pena, entonces merece poner en ello todo el empeño (incluso a veces un poco más).
- La existencia no tiene sentido porque tenga un fin.
- Lo importante no es competir contra el tiempo.
- Sólo soy un escritor que, consciente de sus limitaciones, intenta prolongar un poco más, aunque sólo sea un poco, sus habilidades y su vitalidad.
- Se diría que los demás atletas están sumidos en pensamientos más positivos que los míos. Pero tal vez sólo sea una impresión.
- Hay profesores que explican determinadas materias, siguiendo determinados procedimientos y transmitiéndolos con determinadas palabras, pero creo que muy pocos serían capaces de observar al alumno, de estudiarlo, para explicarle la materia con sus propias palabras, adecuando su explicación a la capacidad y las inclinaciones de ese alumno.
- Todo resulta más fácil si tenemos claro el objetivo que buscamos.
- Perseverancia, severidad y paciencia.
- Aunque hayas pasado muchos malos ratos, aunque la carrera no haya ido como tú esperabas, una vez que rebasad la línea de meta todo eso se desvanece.
- Las carreras de larga distancia han ido educando y formando a esta persona que soy ahora.
- Los tiempos individuales, el puesto en la clasificación, tu apariencia o cómo te valore la gente, no son más que cosas secundarias. Para un corredor como yo, lo importante es ir superando, con sus propias piernas y con firmeza, cada una de las metas. Quedarse convencido, a su manera, de que ha dado todo lo que tenía que dar y de que ha aguantado como debía.
- Al menos aguantó sin caminar hasta el final.